La mística de las ermitas rupestres de Bolea y Aniés
Territorio conocido pero no por ello menos admirado. Ya lo visitamos en plena primavera, con su estallido de verdor y color y su humilde Sotón. Esta vez, nos tocó patearlo con el otoño bien avanzado, en un día algo desapacible y abordando un recorrido algo más ambicioso.