El Pueyo de Jaca, carácter tensino
El Pueyo de Jaca es, hoy por hoy, un pueblo que lame la cola del embalse de Búbal, inaugurado en 1971, en una década en la que perdió su autonomía municipal y se incorporó al ayuntamiento de Panticosa.
El Pueyo de Jaca es, hoy por hoy, un pueblo que lame la cola del embalse de Búbal, inaugurado en 1971, en una década en la que perdió su autonomía municipal y se incorporó al ayuntamiento de Panticosa.
Panticosa y su balneario forman parte del imaginario colectivo del Pirineo. Su pulso sigue siendo fuerte y sostenido, pese a los desmanes urbanísticos perpetrados. Miles de montañeros acuden atraídos por su contundencia granítica. La naturaleza prevalece sobre la ignorancia.
Panticosa es el nexo de unión entre las calizas Sierras Interiores y el granítico Pirineo axial. Es el encuentro entre la permeabilidad y la impermeabilidad, la fragmentación y la dureza mineral. La riqueza natural, por tanto, está servida.
Al Balneario de Panticosa le teníamos ganas desde hace tiempo. Nada o muy poco queda de su antiguo esplendor, pero ese magnífico escenario natural donde se asienta sigue siendo historia viva del Pirineo, marco de mil y una postales fotográficas.